Los Arquitectos son poco comunes. Su tipo de personalidad está formado por un conjunto muy específico de preferencias - Introversión, iNtuición, Pensamiento (Thinking), Juicio - que es compartido sólo por aproximadamente el 2% de la población.
Pragmáticos, analíticos e independientes, los INTJ son obstinados y ambiciosos. Dedican toda su atención a lograr los objetivos que se proponen. Desafortunadamente, esta mentalidad combinada con su preferencia por la introversión no los convierte en los mayores fanáticos de las interacciones sociales. Ciertamente no son el alma de la fiesta y el concepto de charla puede ser tan frustrante para ellos como para cualquiera que esté haciendo el esfuerzo de relacionarse con ellos.
Las personas con personalidad INTJ tienden a ser lógicas y analíticas tanto en su proceso de pensamiento como en su enfoque de resolución de problemas. Tienen una tendencia natural a ser creativos y a buscar soluciones e ideas innovadoras que puedan potencialmente mejorar cualquier sistema y proceso, ya sea en el hogar, en su vida diaria o en el trabajo. Por esta razón, a menudo se les llama Arquitectos o Estrategas.
A estos rasgos de personalidad se suma una clara preferencia por la eficiencia. No se trata solo de buscar soluciones pragmáticas y lógicas: la eficiencia y la eficacia también son dos de sus objetivos más importantes.
En este sentido, los Arquitectos tienden a tener una baja tolerancia a las emociones ya que creen que interfieren con un proceso de pensamiento claro y lógico. Para ellos, las emociones nublan el juicio e impiden que las personas sigan las opciones más racionales y fundamentadas, ya sea porque no pueden separar su lógica de su ser emocional o porque tienen miedo de lastimar a otra persona.
Este desprecio por las emociones a menudo resulta en una cierta animosidad hacia ellas, ya que son percibidas como arrogantes y “sabelotodo”. Afortunadamente para aquellos con una personalidad INTJ, la percepción que otros puedan tener no es de particular importancia para ellos. Disfrutan trabajando solos e independientemente, y obtienen más energía del interior que de las interacciones sociales externas.
Los INTJ entienden que la efectividad de su enfoque analítico y de resolución de problemas depende de la información. Cuanto más informados estén, más datos tendrán para tomar una decisión informada. Su creatividad también está fuertemente influenciada por su curiosidad y buscan activamente aprender más sobre cualquier cosa.
De hecho, suelen ser muy buenos en convertir cualquier situación en una oportunidad para aprender.
Los Arquitectos son pragmáticos y muy racionales en su enfoque. Prefieren basar sus decisiones e interpretaciones en hechos y datos tangibles en lugar de inferir posibles significados o “leer entre líneas”.
Este razonamiento lógico también se aplica a ellos mismos como personas. Entienden muy claramente cuáles son sus fortalezas y debilidades y pueden decir de inmediato si pueden realizar una tarea o no.
Ser libre e independiente es una preferencia natural para las personas con un tipo de personalidad INTJ, ya que es lo que les permite explorar su creatividad e hipótesis de resolución de problemas. Prosperan en un entorno en el que son libres de elegir qué información buscar, qué aprender y qué procesos de pensamiento pueden ser más adecuados para cada situación.
Esta preferencia por ser independiente e incluso por trabajar solo se adapta a los INTJ porque se motivan a ellos mismos. Disfrutan de aprender más, analizar situaciones, buscar soluciones y dejar que su creatividad fluya libremente, pero de manera eficiente.
No necesitan ni les gusta que otras personas condicionen su razonamiento y libertad.
Los INTJ también se motivan a sí mismos porque están orientados a objetivos. Una vez que se fijan un objetivo, se vuelven decididos a lograrlo. No solo eso, sino que su atención está dirigida a hacerlo de manera eficiente y exitosa.
Para los Arquitectos, los objetivos y las ambiciones están intrínsecamente conectados. Quieren lograr sus objetivos, pero también son perfeccionistas. Para ellos, es importante demostrar que pueden hacer algo mejor que los demás. Sin embargo, nunca pierden de vista su razonamiento lógico. Consigue siempre justificar cada paso que da utilizando argumentos lógicos y pragmáticos.
Los Arquitectos son extremadamente versátiles. Son curiosos, creativos e independientes, rasgos que los hacen maleables y flexibles, ayudándoles a adaptarse a cualquier tipo de situación.
Esta es una característica muy importante de los INTJ porque puede ayudarlos a superar o enmascarar sus debilidades, al menos a los ojos de los demás (los INTJ no pueden engañarse a sí mismos y siempre son conscientes de sus debilidades y fortalezas).
A los Arquitectos les gusta tener planes, plazos y horarios y son buenos en la tarea de establecer cualquiera de ellos. Esto les ayuda a estructurar su proceso de pensamiento y enfoque y funciona como una automotivación para lograr los objetivos deseados.
La I en INTJ significa introversión. Esto significa que las personas con este tipo de personalidad tienden a obtener gratificación y energía de su interior y no de las interacciones sociales externas.
De hecho, las interacciones sociales pueden ser agotadoras para ellos porque encuentran a los demás impredecibles. Además, cualquier contexto social aumenta la probabilidad de que los Arquitectos se encuentren con personas guiadas por sus emociones en lugar de la razón, lo que a su vez aumenta la probabilidad de discusiones.
Su naturaleza analítica a menudo se interpreta (a veces correctamente) como arrogancia y un sentido de superioridad. Tienden a aislarse y a considerar inferior a alguien que no es tan analítico, lógico y amante de los hechos como ellos.
A pesar de ser curiosos y buscadores de conocimientos, los Arquitectos pueden ser de mente cerrada y poco receptivos a nuevas ideas. Prefieren permanecer en su “burbuja personal” donde se sienten superiores a los demás en lugar de cuestionar sus propios datos e información.
El razonamiento lógico y analítico es siempre la prioridad para los INTJ, mientras que las emociones y los sentimientos son secundarios. Esta jerarquía a veces puede ser tan marcada que los Arquitectos se vuelven incapaces de interpretar, analizar y comprender ciertas situaciones y eventos en un contexto emocional.
Los Arquitectos son creativos, analíticos y orientados a objetivos. También buscan ser lo más eficientes posible en su enfoque. Todos estos rasgos los hacen perfectos para resolver problemas. Sin embargo, algunas personas con un tipo de personalidad INTJ pueden llevar este perfil demasiado lejos.
En la búsqueda de un enfoque y método más eficiente y creativo, pueden obsesionarse tanto con la perfección que terminan volviéndose ineficientes. En lugar de encontrar una forma adecuada de progresar y lograr sus objetivos, entran en un ciclo interminable de análisis y prueba y error en la búsqueda no de una solución simple, sino de la óptima.
Gracias a su predisposición natural a estar orientados a objetivos y a su gusto por planificar y seguir estrategias específicas, los Arquitectos son capaces de adaptarse a cualquier tipo de trabajo.
Sin embargo, tienden a sentirse más realizados en trabajos en los que tienen un sentido de propósito y en los que se sienten necesarios. También disfrutan de carreras que desafían su intelecto al presentarles problemas a los que deben encontrar la solución.
El trabajo adecuado para alguien con un tipo de personalidad INTJ dependerá de otros factores y preferencias, ya que sus habilidades y aptitudes pueden aplicarse a diferentes contextos.
Por ejemplo, un INTJ tiene el potencial de ser un buen químico, ingeniero de software, chef y constructor. Siempre que una carrera implique el análisis de datos y un enfoque estratégico de resolución de problemas, los Arquitectos tienen el potencial para tener éxito en ellos.